domingo, 25 de junio de 2017

Diario de una investigación (XX): Semana del 19 al 23 de Junio


Arjona en la actualidad

El 20 de Junio proseguí consultando los protocolos de las compras de cordobán giennense con destino al mercado portugués. Estoy dedicando mucho tiempo a este elemento de la economía del Santo Reino, pero creo que es el que va a conseguir los mejores resultados y donde la investigación va a ser más fructífera.

Por la tarde en el diocesano trabajé las capellanías y expedientes matrimoniales de Arjona con la idea de recabar información sobre una familia que alcanzó gran desarrollo económico en el siglo XVIII seguramente por la producción del aceite de oliva: los Valverde. Una señora de este linaje de nombre Juana de Valverde fundó una capellanía llamando alternativamente a miembros de su familia y de la de su marido Luis de Torquemada. Una media docena de pleitos se conservan con abundante documentación genealógica. 

El 21 de Junio por la mañana más noticias sobre las compras de cordobanes por parte del guadamecilero lisboeta. Parece que también compró badanas –el cuero de las ovejas– en grandes cantidades. Más datos sobre los mercaderes de corambre que lo abastecían me van a permitir redondear este aspecto de mi proyecto.

Por la tarde en el Diocesano continué con los Valverde. Los pleitos de la capellanía de Juana de Valverde me permitieron reconstruir los entronques con otras familias de la oligarquía local como los Jabalera, Soto, Carvajal, Vicaría, Tálero, etc. El último varón de esta familia llamado don Miguel Bonoso Valverde Vicaría llegó a acumular un patrimonio cercano a las 2.000 hectáreas en Arjona y su comarca en la mayoría de los casos de olivares.

El 22 de junio en Granada continué con el pleito entre zapateros y curtidores en el Archivo de la Real Chancillería de Granada. Es un documento muy extenso y con testimonios de altísimo interés para todo lo relacionado con el comercio del cuero, no solo en Jaén sino en Castilla. Los jueces introducen preguntas sobre la tradición del curtido de los cueros comparando los usos de Jaén con los de otros lugares como Córdoba, Sevilla o Granada. 

Fregenal de la Sierra en la actualidad

Para mi sorpresa incluso se llegan a describir Fregenal y en menor medida Llerena –ambas en Badajoz– como las poblaciones con mayor desarrollo del curtido y procesado del cuero en Castilla. Y los testigos sabían de que hablaban porque participaban de dicho proceso económico. Así, Francisco Masera, vecino de Jaén y tratante de corambre de Fregenal, Llerena y Zafra, lugares "donde hay mucha cantidad y trato dello mucha cantidad más que en esta ciudad". Gregorio Martínez, por su parte, no dudaba en aseverar que “sabe que en la villa de Fregenal donde es el mayor trato e mejores de corambres que hay en toda España e donde hay muchas tenerías” también los zapateros daban a curtir corambres a los curtidores. Por último, Andrés Hidalgo afirmaba que en Fregenal había en estos años 55 tenerías, un número extraordinario. Tampoco conseguí terminar este día este interminable pleito; espero hacerlo la semana que viene. 


Hasta la próxima entrada!

domingo, 18 de junio de 2017

Diario de una investigación (XIX): Semana del 12 al 16 de Junio

Cuero curtido en un protocolo notarial del Archivo Histórico Provincial de Jaén

El lunes 12 comencé la semana visitando el Archivo de la Real Chancillería de Granada. Seguía buscando información sobre “tenerías” y “corambre”. Encontré un pleito –a mi entender fundamental para mi proyecto– entre los zapateros y los curtidores de Jaén. En un expediente voluminoso se ponía de manifiesto que en las últimas décadas del siglo XVI algunos zapateros se habían saltado las ordenanzas municipales y habían “puenteado” a los curtidores, apropiándose de las fases del trabajo del cuero propias de los segundos. Los curtidores, efectivamente, acusaban a los zapateros de comprar las pieles y curtirlas por su cuenta, utilizando materiales baratos para reducir los costes. Lo más interesante es que se da una lista de estos zapateros “rebeldes” que tenían cámaras en las tenerías de Jaén y que ya no necesitaban de los servicios de los curtidores. ¿Quiénes eran? Pues los que serían los mercaderes de corambre más destacados en las décadas siguientes o sus padres, entre ellos Martín López de Alcaudete y Pedro de Villanueva, seguramente el padre de Gabriel de Villanueva.  

 Esta ruptura del orden jerárquico gremial es típico del verlag system o domestic system donde los mercaderes-hacedores o verlegers controlaban todos los pasos del proceso productivo y comercial escapando de las rígidas normativas gremiales. No terminé de analizar todo el documento, aunque quiero volver a él en los próximos días. Todo apunta a que algo estaba cambiando en el mundo del cuero en Jaén a finales del siglo XVI.

El resto de la semana, de nuevo, doblete entre el Archivo Histórico Provincial y el Diocesano. El martes 13 encontré la fundación de la capellanía de Bernabé Martínez de Alcázar, elemento interesante para dilucidar la genealogía de esta familia tan vinculada al mundo de la producción y el comercio del cuero giennense.

Por la tarde, en el diocesano consulté la documentación de la capellanía fundada por su mujer Catalina Alonso Carrasco. El documento fundacional es extraordinario. Parece que fue redactado en casa del hermano de la dicha sin el consentimiento de su marido. Enumera toda una serie de actuaciones de Martínez de Alcázar regalando bienes a sus amigos y familiares, bienes gananciales y, por tanto, también propiedad de Catalina. Pero para nuestro interés debemos traer aquí una cláusula:

“que por el año de 76 el dicho Rodrigo Alonso Carrasco mi hermano entró en mi casa  [y] dio al dicho mi marido 100 ducados en reales que tenia en poder del dicho Juan García de Agreda y el dicho mi marido lo recibió y tuvo en su poder y el dicho mi hermano solicito y anduvo siete años en el trato de la corambre ayudando al dicho mi marido y al cabo de ellos se casó el dicho mi hermano y solo se le dio en este tiempo la comida y no más”

Dicho documento vincula tanto familiar como laboralmente a dos de los más importantes mercaderes de corambres de finales del siglo XVI: Bernabé Martínez de Alcázar y su cuñado –y agente– Rodrigo Alonso Carrasco.

El resto del documento nos enseña la familia de Catalina y su genealogía. El texto termina de manera abrupta cuando Bernabé Martínez de Alcázar se presenta en la casa de su cuñado y consigue que Catalina revoque el documento. Pleitos posteriores validarían esta fundación “clandestina” de Catalina Alonso Carrasco.

El miércoles 14 por la mañana encontré el testamento del jurado Bernabé Martínez de Alcázar, pero para mi desgracia, con muy pocas referencias a su actividad mercantil. El resto de la mañana lo empleé en consultar más protocolos de Melchor Gutiérrez con nuevos documentos otorgados por Juan de Palma y el citado Bernabé Martínez. En el Diocesano terminé de consultar el expediente de la capellanía de Catalina Alonso. Pese a todo, la disfrutaron los descendientes de la familia de su esposo. Éste consiguió que otorgara un testamento donde lo nombraba a él como patrón dejando en papel mojado su testamento previo.

El jueves 15 buscando el segundo testamento de Catalina Alonso me encuentro con un documento sorprendente. Se trata de un encargo de cordobanes de un guadamecilero de Lisboa residente en la calle de los Doradores a Bernabé Martínez de Alcázar: nada menos que 106 docenas de cordobanes por un valor de algo más de 2.000 ducados. La cosa se pone interesante cuando encuentro contratos similares con los mercaderes Juan de Palma Montañés y el mismo portugués. ¡Buena parte del cuero curtido de Jaén terminó en Lisboa!. Allí sería transformado en "couro dourado" por los guadamecileros portugueses. Pero es que Lisboa a finales del siglo XVI era el equivalente a Sevilla, el gran puerto del emporio comercial portugués. Estos cueros giennenses pudieron terminar en Brasil, Goa, Macao, Amsterdam...


Paredes decoradas de guadameciles o "couro dourado" en un cuadro de Pieter de Hooch (s. XVII)


La Rua dos Douradores de Lisboa en la actualidad

 Por la tarde, en el Diocesano, terminé de ver la capellanía de Cristóbal Ruiz de Alcázar. El resto de la tarde fue infructuosa en las capellanías y expedientes matrimoniales de Alcalá la Real.

El viernes 16 revisé los índices del escribano del día anterior buscando más referencias al guadamecilero de Lisboa. Decenas de documentos de encargos lisboetas a media docena de mercaderes de corambre de Jaén llenan las páginas de este escribano. Entre los documentos un poder del guadamecilero por 2.000 docenas de cordobanes curtidos de zumaque por un valor de más de 40.000 ducados, una cantidad extraordinaria. Otros documentos hablan de compras similares en Córdoba, Sevilla o Granada a través de agentes judeoconversos –“marranos”– portugueses como Jorge Enriques. Una gran red comercial que traficaba con el cuero curtido castellano a finales del siglo XVI y principios del XVII empieza a aparecer ante nuestros ojos.


Hasta la próxima entrada!

sábado, 10 de junio de 2017

Diario de una investigación (XVIII): Semana del 5 al 9 de Junio















De vuelta con el cuero. Las tenerías de Fez en la actualidad

Entrando en el mes de junio, último mes de mi investigación en Jaén, llega el momento de focalizar nuestra investigación en aquellas líneas que puedan resultar de mayor interés. Por otra parte, pese a haber terminado la docencia, esta semana he necesitado bastante tiempo para corregir exámenes y trabajos, además de otros temas burocráticos, por lo que después de un lunes intensivo en Jaén pasé el resto de la semana en Granada.

El día 5 por la mañana en el Provincial –acompañado por Ángel Ruiz Gálvez de la Universidad de Murcia que estuvo investigando este día en Jaén– continué con el escribano Melchor Gutiérrez. Como ya he dicho en entradas anteriores, es un escribano que trabaja con mercaderes de corambre del barrio de la Magdalena. Las redes de abastecimiento de pieles o zumaque y de venta de cordobanes van creciendo con la información que contienen estos protocolos año a año. 

El día 5 por la tarde en el Archivo Diocesano continué leyendo el extenso expediente de la capellanía de Bartolomé Martínez de Alcázar. Los diferentes candidatos a la misma presentan sus genealogías ayudándonos a reconstruir parcialmente el linaje. El mercader no tuvo descendencia de Catalina Alonso Carrasco dejando sus bienes a sus hermanos y sobrinos. Si comparamos a los Alcázar con los Terrones vemos que, el ascenso social en el caso de los primeros prácticamente es nulo si lo comparamos con el éxito nobiliario de los segundos. Partiendo del mismo origen –la mesocracia del mundo del cuero– los primeros no salen prácticamente de ella y los segundos, si bien tras la feminización del linaje, llegan a la nobleza titulada. Pero faltan por analizar muchos elementos de discusión. La riqueza alcanzada, el papel jugado por los parientes religiosos de los Terrones –canónigos y un obispo– y la actuación individual de algunos miembros del linaje como don Antonio Terrones de Robles, referente oligárquico de las facciones de Andújar, además de historiador y cronista. Una primera impresión me lleva a pensar que en el caso de los Martínez de Alcázar el comienzo pudo ser aún más potente que en los Terrones, pero no tuvo continuación en las primeras décadas del siglo XVII, donde las estrategias del ascenso social –compra de oficios y de hábitos militares, fundación de mayorazgos– se podían llevar a cabo con mayor facilidad. Tampoco conocemos de la misma manera los dos linajes: de los Terrones-Albarracín sabemos casi todo; mientras que de los Alcázar solo conocemos las líneas que se oponen a una capellanía, casi siempre lineas secundarias y pauperizadas, no sabemos si existió una línea principal que acumuló los bienes y el prestigio. En cualquier caso, esta comparativa puede dar mucho juego de cara a entender este tipo de procesos. 

El día 9 visité el Archivo de la Real Chancilleria de Granada. Hace unos meses realicé una búsqueda en los catálogos online de dicho archivo. 


Encontrando unas veinte referencias a la búsqueda "tenería" y un número similar para la palabra "corambre". Este viernes consulté aquellas entradas de Jaén relativas al "corambre" aunque de periodos distintos al del estudio.

Uno de ellos de 1524 presenta el conflicto entre Diego de Córdova y Alonso de Albín por el pago de las alcabalas de la venta de cueros. Es una pena no poder contar con documentación seriada de esta renta pues podría darnos mucha información sobre la producción de cueros. 

Otro pleito en 1544, un pleito por la propiedad de unos cueros nos informa del comercio entre Martos y Jaén. Queda claro que los mercaderes-curtidores de Jaén controlaban la producción de cueros de casi todo el reino. La manera de llevar a cabo este control era por medio de contratos con los obligados de las carnicerías de las diversas poblaciones. Estos se obligaban a entregar las pieles "caídas" de los animales sacrificados y enviarlas a Jaén. De nuevo, las mismas familias: Diego Fernández de Albín, Cristóbal de Cazorla.

Estas estrategias desbordaron el Santo Reino y podemos encontrar contratos con responsables de las carnicerías de Caravaca, Mula, Hellín o Lorca (reino de Murcia) o de Huéscar (Granada). A esto se unen los poderes otorgados por los mercaderes de corambre a sus agentes para comprar pieles en otros lugares distantes como Sevilla o Fregenal. Había que abastecer la máquina productora de cueros curtidos que era Jaén. Más corambre, es la guerra! Al final de mi investigación confeccionaré mapas para representar el radio de acción de los mercaderes de cueros de Jaén que pondrán de manifiesto hasta qué punto fue extraordinaria esta industria en el Santo Reino. De momento, un anticipo, ya incompleto tras mis últimas investigaciones: las ventas de cordobanes y cuero vacuno para suelas (en rojo);  compras de cueros (en amarillo) y zumaque (en verde) de la compañía de Bernabé Martínez de Alcazar. 



Hasta la próxima entrada!

domingo, 4 de junio de 2017

Diario de una investigación (XVII): Semana del 29 de Mayo al 2 de Junio

                
Una imagen de la catedral gótica de Tours



La semana ha estado marcada por el congreso internacional "Third International Conference on Food History and Cultures" que ha tenido lugar los días 1 y 2 de junio en la ciudad francesa de Tours. Se trata de un gran evento dentro de los estudios de Historia de la Comida contando con más de 200 participantes de una veintena de nacionalidades. 

Tras viajar en avión desde Málaga a Nantes y luego en TGV el día 31 de mayo por la tarde llegué a la ciudad de Tours, a las orillas del río Loira. Por la noche cené con el profesor de la Universidad de Córdoba, Luis Salas Almela, que también participaba en el congreso. 

Ya el día uno asistimos a la inaguración de las jornadas en la Universidad François Rabelais de Tours.


Presentación del congreso en la Universidad François Rabelais de Tours

Tras asistir a varias sesiones por la mañana en torno a aspectos de la nutrición y la asistencia médica recogí al profesor de la Universidad de Sevilla, Rafael Pérez García en la estación de tren. Por la tarde tuvimos una recepción en la sede del IEHCA (Institut Européen d'Histoire et des Cultures de l'Alimentation), la villa Rabelais, donde degustamos vinos locales y una cena bufet. 


La Ville Rabelais en Tours y los asistentes al congreso


El día 2 por la mañana comenzaron las sesiones Food and Trade in Early Modern Spain de las que he sido organizador. En la primera de ellas el profesor Salas Almela habló detalladamente de la participación de los duques de Medina Sidonia en la pesca y procesado del atún. A continuación presenté un estudio sobre el comercio del atún salado del Algarve portugués y la costa gaditana hacia Italia a finales del siglo XVI. 

El autor de este blog presentando las sesiones "Food and Trade in Early Modern Spain" acompañado del profesor Salas Almela

Acto seguido se relataron las ponencias de los profesores Florido y Zambernardi sobre la pesca actual del atún en las almadrabas del sur de España. Despues de la comida la tercera de las sesiones dedicada al comercio del trigo en Sevilla en relación con las crisis de subsistencia y a los hornos de pan de Mallorca a cargo de los profesores Pérez García y Garí Pallicer.


El profesor Pérez García desarrollando su ponencia sobre el comercio del trigo en la Sevilla de la Edad Moderna y Miguel Garí tomando nota.

Por la tarde nuevas sesiones sobre comida judía y judeoconversa precedieron la conferencia de clausura que puso punto final al congreso.

Hasta la próxima entrada!